Sentí como si rezara con las piernas mientras corría por las calles de nuestra ciudad santa en el Maratón de Jerusalén del pasado viernes. Con los versículos bíblicos corriendo por mi cabeza, me emocionó «correr por las calles de Yerushalayim» (Jeremías 5:1) con mi hijo Dovid y mi hija Bella. Me alegró ver «llenas las calles de la ciudad» (Zacarías 8:5) con más de 20.000 corredores y caminantes que celebraban la energía y vitalidad de Jerusalén. Y gracias al magnífico tiempo, todos los corredores sonreían de oreja a oreja mientras ascendían por las empinadas cuestas de «la ciudad rodeada de colinas» (Salmos 125:2).
Aunque los maratones son habituales en otras ciudades del mundo, en el Maratón de Jerusalén hay una gran atención a la bondad que le da un sabor especial y espiritual. Había cientos de corredores y marchadores discapacitados, y muchos más que estaban allí para animarlos.
Hay muchos recorridos magníficos por muchas ciudades hermosas de todo el mundo, pero quienes corrieron el pasado viernes te dirán que aquí había un sentimiento diferente. Es el reconocimiento de que el pueblo judío ha regresado a Sión y de que sólo en el Maratón de Jerusalén se puede rezar con las piernas.
Echa un vistazo a las siguientes fotos para hacerte una idea del Maratón de Jerusalén 2021.




