En el corazón de Petach Tikva, donde los recuerdos del pasado se encuentran con los retos del presente, tu generosidad está transformando vidas. Gracias a tu apoyo constante, Tenufa Bakehila ha podido realizar reparaciones esenciales en viviendas de supervivientes del Holocausto, garantizando que puedan vivir sus años dorados con seguridad y dignidad.
Este mes de noviembre, el equipo de Tenufa Bakehila trabajó incansablemente para mejorar las condiciones de vida de siete supervivientes del Holocausto en Petach Tikva. Cada reparación, aunque aparentemente sencilla, ha tenido un profundo impacto en la vida cotidiana de estos supervivientes. Desde arreglar sistemas eléctricos peligrosos hasta eliminar moho peligroso, cada mejora ayuda a restaurar no sólo los hogares, sino la dignidad.
Por ejemplo, Sara*. Sus paredes estaban desconchadas y los escalones se estaban convirtiendo en un peligro para su seguridad. Nuestro equipo no sólo reparó y pintó las paredes, sino que también arregló los escalones, garantizando que pudiera moverse con seguridad en su propia casa. Para Leora, superviviente discapacitada del Holocausto, tareas sencillas como utilizar grifos o abrir puertas se habían convertido en luchas cotidianas. Hoy, gracias a su ayuda, estas necesidades básicas vuelven a funcionar correctamente.
Este trabajo que apoyas va más allá de arreglar lo que está roto. Cuando ayudamos a sustituir el grifo de la ducha y la encimera de la cocina de Ben, no sólo estábamos haciendo reparaciones: estábamos mostrando a estos supervivientes que no han sido olvidados, que su comodidad importa, que merecen vivir en hogares seguros y dignos.
En todos los hogares que visitamos, de Jerusalén a Sderot, de Hadera a Kiryat Malachi, vemos la misma gratitud en sus ojos. Estos supervivientes, que han soportado penurias inimaginables, nunca deberían tener que preocuparse por el mantenimiento básico de sus hogares ni vivir en condiciones inseguras.
De cara al futuro
Aunque estamos orgullosos del trabajo que hemos realizado este mes para ayudar a estos siete supervivientes del Holocausto, sabemos que hay muchos más que necesitan nuestra ayuda. Cada reparación que ayudamos a hacer, ya sea instalando mosquiteras en las ventanas de Ruth o arreglando los cables eléctricos de Shifra, nos acerca un paso más a nuestro objetivo de eliminar las condiciones de infravivienda en Israel.
Tu apoyo continuo hace posible esta labor vital. Cada donativo nos ayuda a restaurar otra casa, a levantar otro espíritu y a garantizar que otro superviviente del Holocausto pueda vivir con la dignidad que merece. Juntos, no sólo estamos arreglando casas: estamos reconstruyendo vidas y preservando la dignidad de quienes ya han soportado tanto.
Gracias por formar parte de esta misión crucial. Tu generosidad está marcando una diferencia real y tangible en las vidas de los supervivientes del Holocausto en todo Israel.
*Todos los nombres han sido modificados por motivos de privacidad.