Las viudas de soldados de las FDI no sólo han perdido a un marido, sino a su compañero en la crianza de su familia. Tu ayuda significa que no están solas.
El 7 de octubre de 2024 marcó un trágico hito: un año desde que Hamás atacó brutalmente Israel, asesinando a más de 1.200 personas y cambiando incontables vidas para siempre.
Desde aquel horrible día, cientos de miles de reservistas israelíes han dejado atrás a sus familias y sus carreras para reincorporarse a las FDI. Luchan en Gaza, en la frontera libanesa y en Judea y Samaria para defender a Israel y a los judíos y cristianos de todo el mundo.
Pero lo que a menudo se pierde en la política y las estadísticas son las personas cuyas vidas han quedado destrozadas por esta guerra.
Piensa en las familias de los soldados caídos. ¿Qué les ocurre?
Un año después, tienen más dificultades que nunca y necesitan urgentemente tu apoyo.
Hace sólo un año, Hadas Lowenstern oyó llamar a la puerta algo que cambiaría su vida para siempre.
La historia de Hadas Lowenstern es trágicamente demasiado común en Israel. Es la historia de Sofia Chicheportiche y Neora Swid también.
Con 735 bajas de las FDI desde el 7 de octubre de 2023, la devastación de esta guerra se siente en todos los hogares que ahora tienen un lugar vacío en la mesa.
Cientos de familias carecen de padres, maridos y sostén económico. Y de algún modo, sus viudas y huérfanos deben seguir adelante y llegar a fin de mes.
Las viudas deben criar solas a sus familias sin ingresos sostenibles, una enorme carga financiera que descansa únicamente sobre sus hombros. Los viajes al supermercado se encarecen rápidamente. Una pila creciente de facturas de servicios públicos que hay que pagar. Mientras tanto, el coche está en las últimas; ¿qué pasará cuando se averíe definitivamente?
Un año después del comienzo de la guerra, las familias de los soldados caídos necesitan nuestra ayuda más que nunca. Estos soldados dieron su vida para protegernos; ahora nos toca a nosotros proteger a sus viudas e hijos huérfanos. Sus familias están luchando, emocional y económicamente, y buscan nuestro apoyo. Nada sustituirá a sus maridos caídos, pero tú puede ayudar a aliviar su carga financiera.
Las viudas de las FDI son las únicas que mantienen a sus hijos. Su sufrimiento y estrés son inimaginables, y necesitan nuestra ayuda. Cuentan con nosotros para que les demos la ayuda económica que necesitan para ocuparse de todo, desde las facturas y la comida hasta la ropa y los juguetes. Cada dólar que das importa más de lo que puedas imaginar.
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