En una época en la que la oscuridad ha sido demasiado real en todo Israel, tu generosidad ayudó a crear momentos extraordinarios de alegría para quienes más lo necesitaban.
Gracias a tu apoyo, Yehuda Glick pudo proporcionar este año a 5.000 niños huérfanos de 400 pueblos, ciudades y asentamientos de todo Israel paquetes especiales de Janucá, llevando la luz de la fiesta directamente a sus hogares.

Un faro en tiempos difíciles
No son paquetes corrientes. Para los niños que han perdido a uno de sus padres, las fiestas navideñas pueden hacer que los sentimientos de pérdida y vacío sean especialmente fuertes. Muchos niños de Israel se han quedado huérfanos recientemente, al haber perdido a sus padres, que hicieron el último sacrificio defendiendo a Israel en el conflicto actual. Cada paquete cuidadosamente preparado transmitía un poderoso mensaje a todos los niños pequeños: no se te olvida, se te aprecia y tu alegría importa.
En estos tiempos difíciles en Israel, en los que muchas familias atraviesan dificultades sin precedentes, vuestras contribuciones hicieron posibles momentos de normalidad y celebración para niños que ya han experimentado profundas pérdidas. Para los niños huérfanos cuyos padres cayeron defendiendo las fronteras y comunidades de Israel, estos paquetes aportaron un rayo de luz durante sus primeras vacaciones sin sus seres queridos.

El impacto de tu bondad
Imagínatelo: un niño de Kiryat Shmona, ciudad fronteriza del norte, de un pequeño asentamiento del Negev o de un apartamento de Jerusalén, que abre la puerta y encuentra un paquete lleno de tesoros de Janucá. La chispa en sus ojos al desempaquetar dreidels, monedas de chocolate, velas y otras delicias navideñas refleja la esencia misma de la Fiesta de las Luces.
Este Janucá, gracias a ti, la luz se ha extendido a 400 comunidades diferentes de todo el país, llegando a niños de todas las clases sociales que comparten una experiencia común de pérdida.
Iluminando Israel, niño a niño
En una época en la que la nación se enfrenta a retos extraordinarios, tu generosidad ha ayudado a mantener la tradición de llevar la luz a la oscuridad, el corazón mismo del mensaje de Janucá.
De todos nosotros, y especialmente de 5.000 niños cuyo Janucá se iluminó gracias a tu apoyo: Gracias por ayudar a iluminar la oscuridad.
Que la luz que has ayudado a crear siga brillando durante todo el año. Y que vuestra generosidad y apoyo a los necesitados no haga más que continuar.